jueves, 12 de febrero de 2009

Noticias de Flecha


Flecha está triste. Hace días que no ve a uno de sus caseros y lo echa de menos. Se pasa el día echada en el sofá sin ganas de nada, atenta a un ruido de llaves que indique que él ya está aquí, cuando lo oye levanta las orejas, pero no es él y su cabeza cae vencida por el desconsuelo. De repente se despierta, ¿quizá haya llegado y estando profundamente dormida no se haya dado cuenta?, se levanta, deambula por la casa creyendo verlo en cada rincón. Vuelve al salón, huele la comida, bebe agua. Él no está.

Recuerda el día que la cogió en brazos por primera vez, “¡Me eligió a mí!” pensó Flecha emocionada. Eligió él mismo su nombre con motivo de la forma que tiene la mancha blanca que adorna su frente. No dejaba de acariciarla, de perseguirla, de cogerla, de besarla. Esos recuerdos le producen una lágrima que cae redondeando su mejilla.

“¿Por qué se ha ido? ¿Ya no me quiere? ¿Volverá?” se pregunta. Mientras, espera. En su mirada triste y lejana guarda la esperanza de que un día vuelva a su casa, su hogar.


6 comentarios:

Ju dijo...

Hola!!! Hommy?? Que haces?

Hommy dijo...

Hola fiel seguidora! Pues la verdad que últimamente me paso el día tumbando en el sofá... estoy muy gandul...
A ver si me pongo las pilas y sigo contando mis aventuras.
Un besazo!

Anónimo dijo...

hola hommy!!
yo te he seguido hace un poco de tiempo.. este.. pero con eso d q mandaste saludos a los seguidores ps me anime a salir del anonimato!!

saludos!!
luego te presento a rita :) es mi gatita o yo de ella.. bueno tu sabes q onda

saludos!

vikis pikis

Anónimo dijo...

Buenas!! hace tiempo que no se renueva esto.. espero deseoso tus nuevas aventuras..

b t

Luis Zamarreño dijo...

Hola Hommy.
Tamar me acaba de devolver el libro que le presté. No sé si tú, tan aficionado a la lectura, lo habrás leído también. En ese caso, me gustaría saber qué te ha parecido, pues conozco a pocos gatos lectores.

Hommy dijo...

Hola Luís

Supongo que te refieres a “Cuatro días de enero”! Me gustó mucho, las historias melancólicas me matan y al Sr Miquel le cogí mucho cariño.

Me suelo levantar de madrugada y aunque llamo la atención de mi casera para que me eche de comer y juegue un poco conmigo, no me hace caso... Y ante la tentativa de patearle la cara -cosa que sí que hago los fines de semana cuando llega mi hora de desayuno y no se levanta- me pongo a leer y a escribir en mi blog, aunque hace un tiempo tengo abandonado.

Saludo gatunos :)